Saúl en Español – El perdón incondicional es la mejor medicina
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noviembre 20, 2011
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*Saúl en Español DESPERTANDO 20111120 El perdón incondicional es la mejor medicina
A medida que pasan los días y que las intensificadas energías divinas que envuelven al planeta son experimentadas por un creciente número de vosotros, la urgencia de vuestro propósito de despertar también se intensifica.
Muchos de los que anteriormente despreciaban las ideas y las creencias espirituales por ser anhelos absurdos de los débiles y los inútiles, están empezando a entender que esto no es así, y comienzan a re-examinar sus valores y actitudes, porque se hace evidente para todos que los desafectos sólo conducen al conflicto y a la destrucción de todos.
La llamada a despertar están oyéndose y siendo respondida con entusiasmo creciente por todo el mundo. Mientras vuestro progreso hacia el despertar coge velocidad, es esencial que dejéis todos de arrastrar los pies por los asuntos personales que tienen que resolverse y eliminarse.
Con frecuencia, el tratamiento de estos problemas se ha pospuesto por la equivocada creencia de que son los problemas de otro, o porque se los ha reprimido o negado con mucha fuerza y parecen ser inaccesibles, o porque alguien siente que no sería inteligente o apropiado remover viejos y dolorosos recuerdos.
Pero es absolutamente vital atender a todos los problemas sin resolver, ocultos en los áticos y sótanos de vuestras mentes, donde siguen supurando, y dar los pasos necesarios para perdonar absolutamente a todo el mundo, sin excepción, a quienes creáis o sintáis que os han herido a vosotros o a alguno de vuestros amigos o seres queridos, y ese perdón real, indiscriminado e incondicional crea un efecto dominó, permitiendo y fomentando que el amor fluya por los lugares más oscuros, bañando todo en su bálsamo suavizante.
Perdonar es abrir vuestros corazones al amor y asegura que ocurra la curación; y se necesita que se dé mucha curación, por todo el dolor que se ha infringido durante eones por todo el mundo.
Y naturalmente, perdonando elimináis cantidades enormes de equipaje emocional –equipaje que os ha cargado de peso con resentimiento e ira– permitiendo que encontréis la tolerancia y la felicidad que habéis estado buscando durante eones sin mucho éxito.
El perdón es indudablemente la medicina disponible más eficaz para promover la curación y el bienestar. La mayoría de vosotros habéis respondido en algún momento de mala manera y enfadados al comportamiento accidental de un niño cuando estabais cansados o estresados.
Podéis recordar lo mal que os sentisteis luego cuando os disteis cuenta de vuestra exagerada reacción y acribillaba vuestra consciencia, os perturbaba. Inmediatamente mirabais al niño, pidiendole perdón y humildes disculpas por vuestro inaceptable comportamiento.
El alivio y el gozo del niño al ser perdonado os sobrecogía cuando veíais lo duros que habíais sido, y lo cogíais en brazos en un momento de intenso amor y gozo, mientras prometíais no volver a ser tan duros e impulsivos nunca más. El daño estaba reparado, vuestra relación sanada, ¡y qué felicidad os daba a ambos!.
El perdón de verdad e incondicional nunca deja de sanar al que le ofrece, y una disculpa incondicional por una mala palabra o acto puede ser enormemente curativo para el que ha sido herido.
Subrayando e insistiendo: el perdón incondicional es el mejor remedio, especialmente cuando se combina con el firme propósito de comportarse siempre sólo de manera afectiva.
Cuando os abrís al perdón, y también a la humilde disculpa, vuestro corazón canta su amor, y se da la curación más profunda, dando un intenso gozo a todos los implicados. Esto os prepara para despertar en la brillante luz y el estado lleno de bendición que es el Paraíso, el Cielo, la Realidad, la Unidad con Dios.
Con muchísimo amor, Saúl.
Traducción: PEC
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