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En la quietud de todo lo que ustedes son reside la verdad del corazón. Dentro de esta quietud, ustedes van a encontrar la bioluminescencia que necesitan para retornar.

La Luz dentro de su estructura celular cambia de luminescencia tal como lo hace un pez de aguas profundas. Visualizen su ADN volviéndose bioluminescente, brillando en el centro líquido de sus células, fluyendo y refluyendo.

La Luz que ustedes tanto buscan ha sido activada. Ustedes han despejado los restos del campo de aterrizaje de su ser y su yo. Han anunciado a todos que el contenido molecular de su ser será luz. Han llegado al centro del universo que ustedes representan, deslizándose de las esposas que ustedes han llevado como adorno.

Somos el Consejo de ELLA. Venimos del pasado y del presente simultáneamente. Estamos sentados en la intersección del tiempo, aguardando a un umbral para recordarles que dentro de ustedes están ambos, ella y él, la Diosa y el Dios.

Cuando la Diosa (Dios en nosotros) es activada, no tiene género, ninguna especificación. Los umbrales del pasado se han cerrado ahora muy rápidamente. Ustedes miran atrás (esperando no convertirse en sal) para averiguar quiénes eran, pero todo el panorama ha cambiado y ahora muestra una nueva costa.

Cuando ustedes vinieron a la Tierra, le dijeron al universo que eran capaces y que no se preocupara, que ustedes harían el trabajo. Al estar en la Tierra una gran densidad los envolvió. Su Luz cambió y sus contratos se volvieron una carga.

En esa carga, ustedes perdieron su entusiasmo. Perdieron su pasión. Perdieron su ánimo. Ustedes encuentran poco que los satisfaga en la Tierra. Quieren ser felices en su trabajo de Luz. Quieren ser felices en su trabajo de sanación.

Quieren ser felices en su vida, pero han perdido su gozo por la vida. Han perdido su pasión. Estos contratos y sus cargas que acarrean en sus hombros son como un barril de miel de una vida oriental lleno de lo que necesita ser desechado.

Ustedes tratan de renovarse de nuevo diariamente, y sin embargo nadie aplaude sus acompletamientos cósmicos, sus revelaciones humanas, sus logros. ¿En dónde está el aplauso? ¿En dónde está el reconocimiento que su ser busca?

Una gran depresión ha recaído en la raza humana, una tristeza planetaria, una renuncia antes del cambio de la marea. Esta energía proviene de un recuerdo del ADN de un tiempo alineado con las tres caídas de la Atlántida.

Un tiempo cuando ustedes trataron tan arduamente de elevar al mundo, de elevar la Luz, de elevar a otros a un punto donde estuvieran a salvo, y no tuvieron éxito.

Vida tras vida, existencia tras existencia, ustedes se han dado de sí mismos un 100% y no han visto el acompletamiento de su contrato.

Nosotros, el Consejo de ELLA, les pedimos que lo lleven al límite una vez más. Les enviamos cometas, asteroides, erupciones solares y energías de recién nacidas estrellas. Les enviamos tarjetas postales de Sirio, de las Pléyades, de Arcturus y de Andrómeda.

Les enviamos grabados de un verde pasto y cantos rúbricos de los pájaros. Hacemos todo esto por ustedes para que no se den por vencidos, pues ustedes son la esperanza del planeta.

Ustedes son aquellos que nunca se han dado por vencidos, aunque ellos querían. En esta vida, ustedes vienen a despejar a nivel celular las tres caídas de la Atlántida. No la Atlántida terrestre, sino la destrucción de la estrella Atlántida y las energías que la hicieron caer.

Les pedimos que sean los capitanes de su barco, los maestros de su ser. Ustedes no están destinados a hundirse con el barco en esta encarnación. Esta es la única vez y el único lugar al que ustedes han aguardado.

El universo está a punto de ‘desabrocharse’ sus limitaciones y abrirse para que ustedes vean exactamente qué necesita nacer. Las vibraciones que ya les han llegado causan confusión dentro del cerebro.

Hay tantos niveles de comunicación que están escuchando, hay tantos niveles de Luz que están viendo, hay tantos niveles de corazón que están experimentando, tantos niveles de oscuridad que están venciendo, todo en la misma respiración, en el mismo día, en el mismo pensamiento.

Cada singularidad que ustedes son está dividida en millones de componentes. Eso es aproximadamente el número de componentes que ustedes tienen en cada pensamiento.

Cada uno de sus pensamientos toca todo. Todo a través de su pasado, todo a través de su historial familiar y de sangre, todo a través de las estrellas, todo a través del universo y todo el tiempo, todo el espacio y todas las dimensiones. Ustedes son el lugar donde la vida intersecta la vida.

Si ustedes pudieran ver la tela de luz de la que provienen; si ustedes pudieran saber la historia alrededor de cada uno de ustedes, entenderían que no hay fracasos, que no hay defectos.

Ustedes siempre han aguantado hasta el último minuto y nunca han renunciado, aún cuando el universo no se mostró a sí mismo ante ustedes, aún cuando su gente no fue salvada, aún cuando ustedes no pudieron sanar a su tribu, aún cuando sucedió el desastre. Ustedes creyeron.

Nosotros sabemos cuántas desilusiones y enojos han tenido con el Creador. Sabemos que a veces ustedes sienten que sus oraciones no son respondidas.

Sabemos que ustedes se sienten como si hubieran sido descartados y desertados, pero eso no puede suceder. Ustedes saben que nunca están solos. Les pedimos que lo lleven al límite una vez más por todo lo que han creído y todo lo que no han podido probar.

Somos el Consejo de ELLA. Estamos contenidos dentro de ustedes, así como ustedes están contenidos dentro de nosotros. Somos un océano, y ustedes son los arroyos y los riachuelos y los ríos y los estanques a los que abrimos nuestros brazos y nuestro corazón.

Les pedimos que cuando se sientan cansados y quieran partir de la Tierra, simplemente piensen por un momento sobre la creación y véanla como un océano, y échense un clavado en él. Sólo por un ratito, relájense, vengan a casa.

Los dejaremos ahora con un saber que es más fuerte que nada de lo que ustedes hayan encontrado.

Traductor: Gloria

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